La Supercopa de Europa presentará cuatro años después una final sin pleno color español, la que disputan Real Madrid y Manchester United en Skopje, donde los de Zinedine Zidane buscan extender el dominio nacional con siete conquistas en las ocho últimas finales junto a Sevilla, Barcelona y Atlético de Madrid.

España ganó las tres últimas finales de Supercopas y siete de las ocho últimas disputadas. Representan el dominio del fútbol español en el panorama europeo, en un torneo que desde el año 2000 no pierde un conjunto español la final, cuando lo hizo el Real Madrid frente al Galatasaray turco.

Con trece títulos el fútbol español domina el historial desde la disputa de la primera Supercopa de Europa en 1972, y también es el país que más subcampeones posee, once. Equipos italianos han sumado ocho conquistas y el Manchester United puede permitir acercarse a los ingleses, que han conseguido siete. Su balance en las tres finales que disputó es un triunfo y dos derrotas, mientras que el Real Madrid quiere firmar su cuarta conquista en la que será su sexta final.

Los equipos de LaLiga han ganado ocho de las once últimos ediciones, una racha que comenzó el Sevilla en 2006 contra el Barcelona y que han continuado los barcelonistas (2009, 2011 y 2015), el Atlético de Madrid (2010 y 2012) y el Real Madrid (2014 y 2016).

Sólo el AC Milan, Zenit y Bayern de Múnich han quebrado en el último decenio la hegemonía de los equipos españoles, que han sumado además los tres subcampeonatos logrados por el Sevilla en 2007, 2014 y 2015.

La última final, que se disputó en el estadio Lerkendal de Trondheim entre Real Madrid y Sevilla (3-2), fue la cuarta protagonizada por dos contendientes españoles. Ahora, el Real Madrid puede convertirse en el primer equipo que revalida título de la Supercopa europea desde que lo firmó el AC Milan en los años 1989 y 1990.

El conjunto madridista sigue la estela del equipo milanista y el Barcelona, equipos con más conquistas del trofeo con cinco. En caso de victoria sería la cuarta para el equipo madrileño.

EFE